La acelga amarilla tiene hojas de gran tamaño de forma abollada y ondulada que le dan un toque arrugado al final de ellas de color verde oscuro; además, tiene un tallo grueso de color crema o blanco y la resistencia para estar en climas templados, lo que hace que durante un año completo pueda ser consumida.
Las mejores siembras de la acelga amarilla son en las épocas entre marzo a julio, sin embargo, toma en cuenta que la raza Orea es más lenta en desarrollarse.
Para que aprendas un poco más acerca de esta deliciosa hortaliza, tenemos para ti este artículo, en donde aprenderás cosas que no sabías de este alimento que seguramente has consumido más de una vez, así que ¡Empecemos!
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Acelga de tallo amarillo
La acelga de penca amarilla es reconocida por su efecto de polinización, es abierta de hojas verde oscuro y brillantes, sus tallos son protuberantes y lo mejor es que tiene un sabor agradable para integrarlo a las comidas, especialmente con pollo o pescado.
Esta acelga de penca amarilla debe ser sembrada en un terreno con aire fresco constante, a una profundidad de 2 a 3 centímetros de la tierra, recuerda distanciarla aproximadamente unos 30 centímetros de otras plantas.
Acelga amarilla de Lyon
La acelga amarilla de Lyon es perfecta gracias a lo tierna que son sus hojas y facilidad de cocción, lo mejor es que el agua en la que hierve puedes usarla e integrarla a tu receta de puré, agregándole las maravillosas propiedades que la acelga amarilla tiene para ti.
Conclusión
Las acelgas amarillas son ideales para una cocción rápida de tan solo 10 minutos, lo que también, la hace popular en el mercado es su sabor ligero y único, además de su frescor.
Su versatilidad te permitirá integrarla en todas las recetas saludables que quieras realizar, esto sin dejar de lado todos los beneficios y propiedades que reforzarán tu salud en general. No esperes más ¡Atrévete a probarla!
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